El Jefe de la Base de la Armada en Mar del Plata, contralmirante Gabriel González, pidió su pase a retiro en medio de la crisis que hay en la Armada porque en 10 días no hubo avances en la búsqueda del submarino ARA San Juan.

González era el encargado de recibir en la base a los familiares de los 44 tripulantes y transmitirles las novedades. Fue él quien debió contarles acerca de la explosión que habría sufrido el submarino  tres horas después del último contacto que mantuvo el miércoles 15 a las 7.30.

El ARA San Juan había partido de Mar del Plata con destino a Ushuaia y regresaba a la base naval ubicada en la ciudad balnearia, por lo que los familiares de los tripulantes se reunieron allí.

Según trascendió, González había pedido el pase a retiro tres días atrás, pero la noticia tomó repercusión este sábado, un día después de que Mauricio Macri pidiera no buscar «culpables» hasta no tener una información detallada de qué es lo que sucedió con el submarino.

Fuentes de la Rosada -pese a su intención de bajar la tensión en público- Macri ya tomó la decisión de remover a toda la cúpula de las Fuerzas Armadas. 

En rigor, desde hace tiempo que el Presidente preparaba para fin de año algunos cambios que incluían la remoción del jefe de la Armada, almirante Marcelo Srur; el jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Víctor Amrein y el del Ejército, general Diego Suñer. 

El único que iba a salvarse de la razzia era el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Bari del Valle Sosa. Sin embargo, la desaparición del submarino ARA San Juan, que motivó la intervención de los países más poderosos del mundo, hizo enfurecer a Macri con las fuerzas, por lo que podría adelantar los cambios en la cúpula militar.

El modo en el que se manejó la Armada desde que perdió contacto hace 10 días con el submarino agravó la tensión entre la Rosada y las fuerzas. Como contó este medio se trató de un posible vuelto por los cambios que ya se veían venir.