Schmid ratificó la medida de fuerza para el siete de marzo y aseguró que habrá «algún cese de actividades». La central obrera, que sostiene su enfrentamiento con el Gobierno, se movilizará hacia el ministerio de Producción en señal de protesta por la brutal caída del empleo
El dirigente que integra el triunvirato que conduce la CGT, Juan Carlos Schmid, afirmó que la marcha convocada para el 7 de marzo próximo es «prácticamente inamovible» y, confirmó que la misma tendrá epicentro en el Ministerio de Producción.
Schmid explicó que va a haber una movilización de protesta con algún cese de actividad, que tendrá como fin manifestarse contra «la apertura de la importación» y “ la caída del empleo”. Además, adelantó que, dado que «el gobierno quiere sostener su enfoque, seguramente habrá confrontación» con la CGT.
En declaraciones a Radio Nacional, Schimid se refirió también al aumento de la desocupación y consideró que «no habría mayores inconvenientes» en abrir una discusión con el gobierno destinada a modificar los convenios laborales, pero advirtió que deberá ser “sin que implique flexibilización».
“ Aquí el problema es la distribución de los ingresos», precisó.
Respecto del viaje del triunvirato que conduce la CGT a Roma para mantener una audiencia con el papa Francisco, que trascendió en los medios el fin de semana, «está sin confirmar»: “Ni siquiera sé cuándo será. En diciembre hablé con él y luego se le envió una carta con el pedido formal de un encuentro oficial», dijo Schmid.