La próxima CGT se hará sin Hugo Moyano. Fue la conclusión a la que arribaron ayer los principales referentes de la central sindical en un encuentro destinado a iniciar el sendero para una renovación que debería concluir, antes de mitad de año, con el reemplazo del actual triunvirato de conducción.
El diagnóstico, que comparten otros dirigentes negociadores y que pondrán en común la semana que viene en una cumbre multisectorial suma como futuro excluido al gastronómico Luis Barrionuevo, aunque en este caso por haber dejado un tendal de traicionados en los últimos meses.
La reunión de ayer en el gremio de Sanidad, contó con la presencia de 14 de los 37 miembros del Consejo Directivo de la CGT.
El número estuvo lejos de la mitad más uno necesaria para iniciar el proceso de renovación, pero el peso de los convocados representa la mayoría en un eventual Congreso sindical.
Asistieron dirigentes de los «gordos» de los grandes gremios de servicios, de los «independientes» de lazo estrecho con el Gobierno y los referentes del transporte de pasajeros.
Para el miércoles que viene se prevé un almuerzo en otro sindicato, el de trabajadores de las distribuidoras de gas, con una convocatoria ampliada a otros sectores internos de la CGT que no participan de la conducción pero cuentan a la hora de la puja de congresales.
Entre ellos figuran los ultraoficialistas de las 62 Organizaciones, el Movimiento de Acción Sindical (MASA) y tal vez la participación estratégica de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que todavía debate su lugar en la futura encarnación de la central.
En cualquier caso unos y otros comparten la sentencia: en los cánones del sindicalismo tradicional hay una absoluta mayoría comprometida en la resurrección institucional de la CGT y el reemplazo del triunvirato que todavía integran Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña, aunque sin la participación de Moyano, enfrascado en su disputa con Mauricio Macri, ni Barrionuevo.
Una salvedad: los negociadores creen que será posible sumar a la futura estructura de la central a gremios hoy alineados formalmente con Moyano, pero que dialogan con el resto de los sectores e hicieron saber que no atarán su suerte a la del camionero.
Sobre este último punto surgió ayer el nombre de Schmid como puente con «el moyanismo sin Moyano». En este segmento, los «gordos» anotan, además del dirigente portuario, al referente del Seguro, Jorge Sola, al cervecero Carlos Frigerio, al panadero Abel Frutos y al dirigente de las fábricas de calzado Agustín Amicone, entre otros.
Varios de los participantes dijeron haber hablado con Schmid para disuadirlo de renunciar al triunvirato y mantener su cargo al menos hasta la convocatoria a un proceso de renovación.
Ese proceso debería seguir los siguientes pasos: reunir el Consejo Directivo con al menos la mitad más uno de los integrantes resueltos a votar el llamado a un Comité Central Confederal, a su vez instancia previa al emplazamiento de un Congreso para validar la renuncia de las actuales autoridades y elegir las nuevas.
Paradójicamente, la primera escala es la más trabajosa por la propia constitución del actual Consejo Directivo, que en agosto de 2016 distribuyó cargos para los sectores en los que antes se dividía la CGT: la de Moyano, la de Barrionuevo y la de Antonio Caló. Zanjada esa instancia, los «gordos» y los «independientes» no deberían tener problemas para hacer valer su peso específico.
Como anticipo de ese momento, ambos grupos mostraron fuerza ayer y dieron a entender que serán los responsables de nominar al futuro secretario general de la CGT.
Hasta ahora su candidato más firme es Daer, anfitrión ayer de la cumbre junto a Carlos West Ocampo.
Junto a ellos participaron Armando Cavalieri (Comercio), su colega del grupo de los «gordos»; José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Andrés Rodríguez (estatales de UPCN) y un referente de los albañiles de Uocra, como integrantes de los «independientes»; dirigentes de los gremios del transporte de pasajeros UTA (colectiveros) y La Fraternidad (maquinistas de trenes); el petrolero Guillermo Pereyra (exaliado de Moyano), el docente Sergio Romero, el portero Víctor Santa María, y Rodolfo Daer, de Alimentación.
También hubo representantes de gremios que integran el Consejo Directivo como la Asociación Obrera Minera, los supervisores metalmecánicos (Asimra) y modelos.