El Sindicato de Vialidad presentó en la justicia federal una denuncia por sobreprecios que apunta a la gestión Cambiemos y se mete con una de las empresas emblema del entorno presidencial, la ya sospechada de corrupción: IECSA
En el escrito judicial se especifica que el tramo más importante de la construcción de la ruta 8, entre Pilar y Pergamino, que fue licitado por el kirchnerismo, en 2015, por 285 millones de pesos, pero ahora se pretende pagar nada menos que 2.500 millones de pesos. Se trata de un nuevo monto nueve veces mayor del valor original.
La beneficiaria de la maniobra denunciada por la organización que comanda Graciela Aleñá es la empresa que fuera del primo de Mauricio Macri y el sorteo judicial determinó que la causa recaiga en manos del juez Julián Ercolini, el mismo que instruyó la causa de la obra pública contra el kirchnerismo por la obra vial de Santa Cruz, que esta semana tuvo a CFK en el banquillo de acusados.
La obra de Pilar a Pergamino está dividida en nueve tramos: a los dos tramos contiguos al de Iecsa se les autorizó un aumento del 35 y el 45 por ciento, mientras que el de IECSA recibió un incremento del 120 por ciento y en total, con la actualización por inflación y costos más altos, el aumento es del 877 por ciento.
El argumento para el nuevo monto es una modificación del trazado. Sin embargo no se licitó nuevamente y el proyecto incluye menos recorrido, menos puentes, e inexplicablemente un valor sensiblemente mayor.
En la denuncia del sindicato de Vialidad se consigna que los precios promedio de las proyectos, comparados con las obras que se están haciendo, son un 37 por ciento más altos.
La conclusión de la Oficina de Costos es lo que convierte a la presentación en una denuncia de sobreprecios.