El último reporte oficial sobre los homicidios cometidos en el Gran Rosario en este año muestra con crudeza que el aumento de la violencia en esa ciudad de la Argentina no cede, pese a las acciones que tomó el Gobierno en los últimos meses tras el ataque al local de la familia de Antonela Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi, y el crimen de Maximiliano de Jeréz, un niño de 12 años que recibió un balazo dirigido a un búnker de drogas.
El documento, señala que al 4 de mayo de este año se cometieron 106 asesinatos. Fuentes judiciales aclararon que el informe aún no incorporó las últimas dos víctimas, debido a que se cerró antes, por lo que la cifra ascendería a 108 homicidios en 124 días, el número más alto en el mismo periodo de tiempo desde 2014, incluso más que en el 2022, ciclo en el que se registró el récord de víctimas en la ciudad.
En los años más sangrientos, 2014 (254) y 2022 (291), se contaron de enero a mayo, 104 y 100 asesinatos, respectivamente. En 2023, en tanto, se contabilizaron 26 en enero, 32 en febrero, 22 en marzo, 21 en abril y 5 en mayo.
La salvedad es que los agentes judiciales que llevan la cuenta no suman los últimos dos: un doble crimen descubierto en un camino rural este jueves por la mañana en la localidad de Villa Gobernador Gálvez, al Sur de Rosario.
En ese lugar, tras un llamado al 911, la Policía encontró dos cadáveres acribillados a tiros de dos personas jóvenes, según el parte, de unos 25 años. Aun los investigadores no lograron identificarlos. Los peritos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) levantaron de la escena 17 vainas servidas calibre 9 milímetros y nueve plomos deformados, algunos encamisados.
Dos jóvenes fueron acribillados en un camino rural
El médico policial constató que uno de los cuerpos presenta varios orificios de arma de fuego: 5 en la oreja izquierda, 2 en la frente y uno en el brazo izquierdo. El otro cadáver recibió tres tiros en la mejilla izquierda y dos en la derecha, dos en pecho, uno en el brazo izquierdo y múltiples en el cráneo. Además, los detectives secuestraron prendas de las víctimas: dos buzos tipo canguro y una gorra marca ICON, detallaron.
Tras los homicidios de las últimas horas, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, reclamó a las autoridades del Ministerio de Seguridad provincial “mayores recursos económicos para más despliegue policial”.
El miércoles por la tarde fue asesinado a balazos Mauro Augusto Villamil, un empleado de una estación de servicio de 36 años, cuando se salía de hacer compras en una verdulería: esa noche iba a comer un asado con sus compañeros de trabajo.
Los tiros que lo mataron estaban dirigidos a la verdulería “La Vieja Esquina”, ubicada en Gutiérrez al 1300, esquina Corrientes, del barrio Tiro Suizo, presumiblemente en un plan extorsivo. Dos empleadas resultaron heridas. “Esto no se aguanta más. No tenemos que soportar este maltrato, caso contrario que nos traspasen las fuerzas de seguridad a nosotros”, dijo el intendente Javkin a la prensa, tras otra jornada violenta en Rosario.
Además, hubo 650 balaceras, entre extorsiones, amenazas y abusos de armas, según las fuentes.
Javkin había reclamado que los encargados de la seguridad a nivel nacional presten atención a cómo llegaba la droga que se vende al narcomenudeo en la zona y desata una guerra entre las bandas por el territorio.
A principios de marzo, el presidente Alberto Fernández decidió enviar a esa ciudad 400 gendarmes para completar un total de 1.400. Además, anunció el envío de ingenieros del Ejército Argentino para participar en la urbanización de barrios populares.
Por último, informó que sumarán 600 cámaras de vigilancia con reconocimiento facial. Medidas que se suman al convenio de colaboración con el RENAPER para validar identidades a través de un sistema de identificación.