Oyeron gritos y Tamara Ramírez (26) salió de la habitación con su novio Mariano, los dos oficiales de la Policía Local de Almirante Brown, para ver qué pasaba. En el comedor encontró a su padre, también policía, peleando con un ladrón.
El asaltante se vio rodeado y le disparó a la pareja. La mujer recibió un tiro en la cabeza y murió en el acto. A su pareja lo balearon en la pierna.
El drama ocurrió este sábado a la madrugada, alrededor de las 3, en una casa ubicada en Los Patos al 900, en Glew, el sur del Conurbano. Por el hecho, la Policía detuvo a un ladrón de 18 años identificado como Daniel Alexis Vargas.
Todo comenzó cuando el ladrón ingresó a robar por la ventana a la casa donde vive el teniente primero de la Bonaerense Serafín Ramírez. El ladrón estaba armado con un revólver calibre .32 corto, plateado y en pésimas condiciones, y comenzó a forcejear con el agente.
En ese momento, Tamara y su novio Mariano Albornoz (24), que vivían en la misma casa, oyeron la discusión y salieron del cuarto con sus armas reglamentarias. La pareja quiso defender al teniente pero en el forcejeo el ladrón logró hacerse de una de las pistolas 9 milímetros y disparó varias veces.
Tamara recibió un disparo en la sien que le provocó la muerte en el acto y Mariano, un balazo en una pierna. El atacante también le robó el arma a Tamara y escapó corriendo.
Los oficiales llamaron al 911 y agentes de la comisaría 7° de Glew realizaron un intenso rastrillaje en la zona para hallar al sospechoso. Gracias a las declaraciones de testigos que vieron escapar al delincuente, la Policía logró dar con él en una casa ubicada en Plumerillos y Los Patos, a la vuelta de la casa de los oficiales.
El ladrón había entrado allí amenazando al dueño de casa, un albañil de 27 años al que le robó su ropa de trabajo para continuar con su fuga sin ser reconocido.
El asaltante tenía domicilio en una villa de Dock Sud, en Avellaneda.
En la casa del albañil el sospechoso descartó las dos pistolasreglamentarias de los policías con sus cargadores. En tanto, el revólver calibre .32 lo abandonó en el lugar donde ocurrió el crimen de Tamara.
Por el hecho, el fiscal de la UFI N° 3 de Lomas de Zamora, Gerardo Loureyro, imputó al detenido por «homicidio criminis causae».
En tanto, el oficial Albornoz fue trasladado a un hospital de la zona, mientras que el padre de la víctima recibió contención psicológica a la Delegación de Servicios Sociales local.
Una de las hipótesis que manejan los investigadores es que el sospechoso tenía el dato de que en la casa a la que entró a robar vivían los tres policías y que su objetivo fue robar sus armas reglamentarias.