Pasada las 21:30 de ayer fueron más de tres disparos los que se oyeron en el barrio Villa Perrando de Resistencia. Es que, según informó la Policía -minutos más tarde- hubo un desorden callejero que culminó con persecución, disparos y un adolescente detenido. 

Según consta en el parte policial, uno de los patrulleros llegó a la intersección de Rivadavia y calle 3, donde un grupo de personas, entre 8 y 10, promovían desorden en la vía pública. Éstos, al observar a la Policía, comenzaron a arrojar ladrillos al móvil y al personal actuante.  

A raíz de ello, los agentes solicitan apoyo en el lugar, pero esto no supuso que las personas depongan su actitud, por lo que continuaron arrojando ladrillos contra los efectivos quienes, tal lo indica el reporte oficial, debieron “actuar en consecuencia”.  

Así, los agentes efectuaron disparos intimidatorios con postas de goma al aire, pero tras éste disparo se oyó un estampido, similar a un arma de fuego, esto alertó a los agentes ya que no provenía de sus armas reglamentarias.  

Comenzó entonces una persecución para dar con los jóvenes que comenzaron la riña. Dos de ellos emprendieron su fuga a pie por la calle 3 en dirección a la avenida Rivadavia. En el trayecto, uno de ellos arrojó dos tramos de caño. Eran armas de fabricación casera tipo tumbera.  

Los agentes lograron demorar a uno de los jóvenes en la intersección de Rivadavia y calle 3. Se lo identificó como N.G de 18 años. Entre sus prendas tenía un cartucho calibre 12/70 de color rojo. 

En tanto, el otro joven que arrojó la tumbera, escapó por calle 3 y se perdió de vista al ingresar en uno de los pasillos del mencionado barrio.  

Se trasladó a N.G a la División de Medicina Legal y se secuestró el arma de fabricación casera, que tenía una vaina servida calibre 12/70 en su interior.  

La fiscal interviniente, Rosana Soto, dispuso se lo notifique de su aprehensión en la causa por “Resistencia y atentado contra la autoridad”.