En el Gobierno corre con fuerza la versión de un cambio importante de gabinete que podría efectivizarse este fin de semana y que podría incluir algún tipo de guiño a los gobernadores peronistas
Tras sondear la incorporación de Horacio Rodríguez Larreta como jefe de Gabinete, Mauricio Macri estudia varias alternativas para estabilizar el rumbo de su gestión, que él mismo reconoció este jueves ante empresarios, atraviesa una tormenta de frente.
Una alternativa que se baraja es la eliminación de la tríada de jefatura de Gabinete para que Marcos Peña siga siendo el coordinador de los ministros pero ya sin los controllers Mario Quintana y Gustavo Lopetegui.
Otra versión, menciona a Quintana como posible ministro de Economía. El vicejefe de gabinete, que esta semana viajó en lugar de Nicolás Dujovne a dar explicaciones a Wall Street, no tiene el respaldo de buena parte del gabinete que lo culpa por varios de los errores que dejaron al Gobierno en una situación crítica.
«Es nuestro propio Higuaín, no emboca una», se quejó ante una fuente del Ejecutivo.
En lugar de Dujovne también se habla de sumar figuras propuestas por el peronismo de los gobernadores, o al menos de mejor diálogo con ese sector, que lejos quedó de saciarse con el nombramiento de Dante Sica en Producción, un ministerio que mantuvo la estructura que había armado Francisco Cabrera.
En ese contexto aparecen los nombres de Miguel Peirano y Roberto Lavagna, hoy en el espacio de Sergio Massa y Miguel Pichetto, que funcionan cada vez más en tandem y mantienen el pulso diario de la negociación con la Casa Rosada por el presupuesto que viene.
El ex ministro de Economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner ya recibió una oferta concreta para sumarse al gabinete y hasta donde supo, todavía no contestó.
Los rumores también tocan a Rogelio Frigerio. El ministro del Interior es mencionado por algunos sectores como jefe de Gabinete en acuerdo con el peronismo.
Pero también se menciona su candidatura a gobernador de Entre Ríos, que él mismo hizo correr semanas atrás en esa provincia.
El principal motivo por el que Macri está analizando cambios de gabinete es la falta de confianza que se ganó el actual reparto de ministros.
No sólo de parte del mercado, sino de los gobernadores con los que el Ejecutivo quiere compartir el ajuste pedido por el FMI.
Los mandatarios provinciales cuestionan a los colaboradores más cercanos de Macri porque no cumplen acuerdos y no tienen «códigos». «La quieren toda para ellos», rematan desde las provincias.
«No importa si es cierto o no, pero el actual gabinete tiene un problema de credibilidad en la política que está complicando cerrar con el peronismo», explicó a un funcionario al tanto de las negociaciones con los gobernadores.
Como explicó este medio, el decreto de Macri que fulminó el Fondo Sojero -que contemplaba la transferencia a provincias y municipios del 30 por ciento de lo recaudado por retenciones- abrió una nueva pelea con los gobernadores, que aseguran que el presidente incumplió el pacto fiscal y ahora amenazan con retirarse.
Es apenas un ejemplo de un diálogo que no transita con amabilidad que requiere acordar el presupuesto del año que viene con un recorte de 300 mil millones.
En ese sentido, este jueves, el misionero Hugo Passalacqua, uno de los gobernadores que cultivaba una buena relación con la Rosada, salió a pegarle al Ejecutivo por la eliminación del Fondo Sojero a la que calificó como un «mazazo».