Diana Pipkin y su hija, la periodista Luciana Mantero, participaron de la marea verde que le pidió al Senado la legalización del proyecto aprobado en Diputados.
Diana Pipkin marchó a la plaza del Congreso junto a su hija, la periodista Luciana Mantero, la esposa del jefe de Gabinete Marcos Peña, en apoyo a la ley de aborto legal.
Después de marchar contra el FMI el pasado 9 de Julio, la suegra de Peña formó parte hoy de la inmensa marea verde que le pidió al Senado por la aprobación del proyecto de ley de Diputados.
Pipkin llegó a la plaza junto a su hija, Mantero. Ni la lluvia ni el frío lograron intimidarlas. No es la primera vez que la esposa del jefe de Gabinete se manifiesta en favor del aborto, ya lo había hecho en varias oportunidades e, incluso, en los últimos días grabó un video con un pedido concreto a los senadores para que apoyen la ley.
Del mismo modo, resulta que la suegra de Peña también participa en política. Lo hace desde la Facultad de Sociales de la UBA, donde ejerce como docente.
Mantero asistió a a la movilización acompañada por su madre Diana Pipkin, según muestra una foto que publicó en las redes sociales. «Por todas las mujeres que deciden abortar y exponen sus vidas #abortolegalparanomorir #Quesealey», fue su mensaje.
«#Quesealey #abortolegal #libertad para las mujeres #micuerpomidecisión», dijo al pie de otra foto que la muestra con el pañuelo verde característico de la campaña.
Hace unos días, Mantero había difundido un video en el que les reclamó a los senadores «que el aborto sea ley».
«Con pesar, con dolor, miles de mujeres deciden cada año hacerse un aborto. Senadoras y senadores, denles la posibilidad de acceder a condiciones sanitarias seguras, a no tener que arriesgar sus vidas. Acceder a consejerías. Que el aborto sea ley. Aborto legal ya», dijo la periodista en esa oportunidad.
Luego publicó en el diario Infobae una columna titulada «Estoy a favor de la Ley, no del aborto, sí de la vida» para explayarse sobre el tema.
«El velo de la ilegalidad, hacer de cuenta que no pasa, no da registros, ni números claros, expone a las mujeres y hasta alienta la especulación de la industria de las drogas abortivas. Así como están las cosas en relación al aborto, no funcionan. Por eso hoy digo, #QueSeaLey», concluía el texto.