“Aguardamos una definición del presidente de la Nación y de Fernanda Raverta”, señaló el jefe regional NEA de Anses, Agustín Aleman, al dar cuenta de las posibilidades de un nuevo pago del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) antes de finalizar el año.

Así, reveló a Agencia Foco que las gestiones existen de parte de algunos gobernadores, pero la determinación queda en manos de Alberto Fernández, dado el esfuerzo fiscal que supone un nuevo desembolso, el cuarto desde que en abril se creó esta herramienta para garantizar ingresos a sectores vulnerables afectados por la paralización de actividades durante la cuarentena.

Dada la estructuración de los pagos, se estipula que para que impacte en diciembre –y más que nada hacia fin de año- los desembolsos deberían comenzar durante noviembre mismo.

Entre los meses de abril y mayo, 319.356 personas en el Chaco cobraron el primer bono, lo que significó una inyección de $3.193.560.000. Al segundo pago lo percibieron más de 350 mil beneficiarios ($3.500 millones). Mientras que al IFE 3 lo percibieron en la provincia 347.580 personas en total, producto de una depuración de la base de datos y de la recuperación de algunos empleos a partir de la reactivación de algunas actividades.

No más allá del 15 de diciembre

Durante un diálogo a través de Zoom con periodistas, hace dos semanas, el gobernador Jorge Capitanich respondió sobre la posibilidad de un nuevo desembolso del IFE antes de fin de año, en base a sus contactos y gestiones permanentes ante la Nación.

“Tenemos un diálogo permanente con Anses, con Fernanda Raverta, con quien estuvimos trabajando en la hipótesis de que, si se confirma un nuevo IFE, lo podemos proyectar cercano a diciembre”, adelantó Capitanich. Por eso marcó que “tomar la decisión implica elaborar un cronograma que no impacte más allá del 15 de diciembre”.

El mandatario recordó que en el país percibieron el bono unas 9 millones de personas desocupadas, mientras que en el Chaco fueron 350 mil en promedio, generando desembolsos por más de 3500 millones de pesos, con la consecuente inyección a la economía local y al consumo.

“Es un flujo de recursos muy significativo para la provincia”, indicó y sumó: “Las distintas estrategias de transferencias de recursos beneficiaron a 547 mil personas sobre un total de 1,2 millón de habitantes, con distintas modalidades, desde intervenciones alimentarias hasta el sistema de seguridad social”.

Reconoció al respecto que “esto nunca alcanza a compensar los problemas”, indicando así que existen “actividades no esenciales fuertemente afectadas” por los efectos de la pandemia. “Las compensaciones son siempre insuficientes”, agregó. 

Líder en bancarización

Por último, sobre la temática, Capitanich destacó la bancarización de los beneficiarios del IFE en la provincia a través del Nuevo Banco del Chaco, lo que facilitó progresivamente el pago de las distintas etapas evitando aglomeraciones.

En ese sentido, un informe de Anses confirmó que Chaco es la provincia que mayores avances logró a partir de la bancarización de la mayor parte del universo de personas que cobran el IFE, teniendo sólo un 10% del total que percibía el importe por ventanilla.