Durante los meses fríos, una epidemia de bronquiolitis afecta cada año a los niños más pequeños, a los menores de dos años, llenándose así los consultorios médicos, las urgencias pediátricas y las camas de los hospitales, de recién nacidos y lactantes con tos, mocos.
Y algunos con dificultad al respirar que precisan ser hospitalizados para recibir oxígeno, incluso apoyo respiratorio en forma de ventilación mecánica.
La bronquiolitis no tiene tratamiento, los antibióticos, corticoides y broncodilatadores no son útiles, aunque se utilizan tan frecuentemente como inadecuadamente.
Sin embargo, los niños graves, generalmente los más pequeños, menores de 4-8 semanas, pueden necesitar hospitalización para recibir oxígeno, vigilancia especial y, a veces, soporte respiratorio a través de una máquina llamada respirador.
El director del hospital Pediátrico “Avelino Castelán, Hugo Ramos, sostuvo que el invierno trae consigo la ocupación de camas con pacientes con bronquiolitis “Esta es la época de mayor demanda de estas patologías respiratorias y una de ellas es la bronquiolitis en los niños menores”.
Además, afirmó que actualmente el hospital está con capacidad colmada “tenemos gran demanda de chicos internados por patologías respiratorias teniendo un promedio de 400 consultas diarias de lunes a lunes y en un 80%, terminan internados”.
Asimismo, aseguró que todas las patologías respiratorias son prevenibles: “Primero insistimos en la lactancia materna hasta los 6 o 2 años de edad, y por otro lado, evitar el hacinamiento, cubrirse la cara al toser o estornudar con el ángulo del brazo, evitar los braceros y usar pañuelos descartables”.
Fuente: (Diario 21)