Este jueves era un día clave para los choferes del servicio de transporte público, quienes esperaban cobrar sus salarios de noviembre, tras el compromiso asumido por el gobernador, Jorge Capitanich con el gremio de la UTA.
Según indicó el secretario General, Raúl Abraham, hasta el mediodía no tenían nada, pero cuando amenazaron con otra medida de fuerza, el dinero apareció.
“Desde las 14 me avisaron que estaban en el banco, transfiriendo el dinero, y a partir de las 15 comenzó a impactar en la cuenta de los trabajadores”, aseguró el sindicalista.
“Todo a última hora, pero bien. Hasta el mediodía no tenía novedades”, agregó el dirigente.
Además, desde la Subsecretaría de Transporte remarcaron que no se daría otro paro y que el transporte público de pasajeros circularía normalmente, “al efectuarse el compromiso asumido por parte del Gobierno de el pago de los subsidios”, explicaban a través de un comunicado.