El Ministerio de Capital Humano informó que el operativo quedará a cargo del Ejército Argentino y el Ministerio de Defensa. La fundación CONIN, de Abel Albino, monitoreará el reparto de los productos.
ras cuestionar a la Justicia por involucrarse en la polémica del acopio de alimentos, el Ministerio de Capital Humano informó que el martes 4 de junio comenzará el operativo de distribución de los productos alimenticios ubicados en los depósitos de Villa Martelli, provincia de Buenos Aires, y Tafí Viejo, Tucumán.
Según informaron desde la cartera conducida por Sandra Pettovello a PERFIL, el Gobierno «firmó un convenio con la Fundación CONIN para que, a través de 64 centros de distribución, sus comedores y merenderos, facilite la provisión de más de 465 mil kilos de leche en polvo a los sectores sociales vulnerables».
Cómo será el operativo para repartir los alimentos
«La entrega de la mercadería tendrá una duración de dos semanas, teniendo en cuenta las fechas de vencimiento de los productos. Para garantizar una logística rápida, eficiente y sin intermediarios, el operativo contará con la colaboración del Ejército Argentino y el Ministerio de Defensa«, agregaron.
La Cooperadora para la Nutrición Infantil fue fundada y se encuentra a cargo de Abel Albino desde 1993. La ONG quedó a cargo de la certificación, mediante la presentación de informes, de los avances periódicos y de un reporte final del empleo efectivo de los alimentos en los comedores y merenderos.
La decisión del superministerio regenteado por Pettovello se conoce luego de que el juez federal Sebastián Casanello ordenara el diseño y ejecución de un plan para distribuir la comida retenida en Villa Martelli y Tafí Viejo en un plazo de 72 horas.
Una denuncia del dirigente social Juan Grabois y una investigación periodística posterior destaparon que la administración libertaria guardaba unas 5.000 toneladas de alimentos en dos almacenes del extinto Ministerio de Desarrollo Social.
Leche en polvo, yerba y aceite entre otros artículos aguardaban para ser distribuidos en un contexto de recesión y aumento de la pobreza y la indigencia.
En un principio, el equipo legal del Ministerio de Capital Humano apeló el fallo de Casanello aunque, con el correr de los días, cambió de estrategia y optó por acelerar el protocolo para el reparto de la comida. En el medio, el Gobierno echó al subsecretario de Niñez y Familia, Pablo de la Torre, envuelto en una trama de mala praxis y supuesta corrupción.
El Gobierno apuntó contra Casanello por los alimentos
Esta mañana, subsecretaria legal de Capital Humano, Leila Gianni, cuestionó en duros términos a Casanello por haber dado luz verde al planteo presentado en la Justicia por Grabois para que el oficialismo dé cuenta de las existencias y las reparta.
«No vamos a permitir que jueces militantes nos digan cómo diseñar o ejecutar una política pública», disparó la funcionaria nacional en declaraciones televisivas, en un intento de vincular al magistrado de Comodoro Py con una parte de la oposición.
Al mismo tiempo, Gianni aseguró que «no había alimentos vencidos» aunque sí «próximos a vencer» en los dos depósitos.
«Nosotros mañana tenemos una audiencia en la sala 2 de la Cámara Federal para llevar los argumentos por los cuales apelamos la cautelar del juez Casanello, que nos había obligado en un plazo de 72 horas a presentar un plan de distribución y su rápida ejecución», anticipó.
Por otra parte, la abogada de 39 años, que formó parte de la gestión de Alberto Fernández, denunció que algunos de los productos acopiados «fueron adquiridos en licitaciones irregulares, como aceite y yerba» y adelantó que esta semana realizarán una nueva denuncia al respecto.
«Quiero reafirmar la política pública alimentaria que está llevando adelante esta gestión. Dejamos atrás un asistencialismo que no solucionó el problema de la pobreza, para ir a una asistencia directa. Asistimos directamente a los beneficiarios dejando atrás a los intermediarios», acotó.
Por último, la mujer fuerte de Capital Humano que suena para reemplazar a de la Torre consignó que «detrás de los alimentos hay un negociado enorme de las organizaciones sociales y de los militantes del hambre, con la participación de exfuncionarios del gobierno anterior».