Tras un tratamiento psicológico y por el pedido de los padres, se efectuó la interrupción voluntaria del embarazo de una nena de 12 años, abusada por el esposo de su tía en la zona rural del departamento Banda de Santiago del Estero.

 El embarazo se constató pocas semanas después que la nena le revelara a su madre, entre lágrimas, que el esposo de su tía materna la abusaba desde hacía dos años.

 Tras la detención del acusado luego de la denuncia efectuada por la madre de la víctima, la Unidad Fiscal solicitó una serie de medidas para asistir a la niña, quien iba a convertirse en madre.

 Varias fueron las entrevistas que la menor tuvo con el equipo de psicológos de la fiscalía bandeña. La noticia de la gestación de un bebé afectó aún más a la víctima.

 El acusado con cada ultraje la amenazaba con que debía permanecer callada para salvar la vida de su tía y de sus pequeños primos, recuerda hoy el diario El Liberal de Santiago del Estero.

 Ante esta situación, los padres de la menor pidieron que se interrumpiera el embarazo y desde la fiscalía se dio intervención a la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia Santiago del Estero (Subnaf).

 El organismo,tras realizar pericias psicológicas a la menor, solicitó que a través de un acuerdo con el Ministerio de Salud, la niña fuera trasladada a un centro asistencial para que se lleve a cabo el procedimiento.

 Para continuar con la investigación, desde la fiscalía se solicitó que se secuestrara material genético del feto para que el mismo sea cotejado con el ADN del acusado.

 Mientras tanto desde la Unidad de Abusos Sexuales a cargo de Alicia Falcione se solicitó este miércoles la prórroga de la detención del denunciado, la cual fue concedida por el juez Raúl Santucho hasta tanto se obtenga el resultado genético.

 Cabe recordar que el Ministerio Público secuestró un teléfono celular en el que la niña recibía mensajes de texto por parte del acusado, quien no solo le decía que «la amaba y que quería tener un hijo con ella» sino que además, en caso de que quedara embarazada, él se la llevaría a vivir con él.

 El relato de la pequeña en Cámara Gesell fue contundente y sirvió para que la fiscalía ordenara la inmediata detención del depravado de 38 años.