En medio de la polémica por el protocolo que pretende imponer la ministra Patricia Bullrich a las fuerzas de seguridad, un integrante de la Bonaerense mató de un escopetazo en el pecho a un cuidacoches en la ciudad de La Plata.
El caso fue calificado por las fuentes como “confuso”. Ocurrió en la madrugada de este jueves en la esquina de las calles 4 y 50, a dos cuadras del Ministerio de Seguridad que conduce Cristian Ritondo.
La versión oficial habla de una intervención a partir de una discusión entre dos personas, aunque otros voceros aseguran que el efectivo medió para evitar un presunto robo.
Lo cierto es que el policía involucrado disparó con su escopeta y le provocó la muerte a un hombre de 37 años, posteriormente identificado como Mario González. De acuerdo con las fuentes, la víctima era un trapito que trabajaba hace rato en esa cuadra y que, presuntamente, mantuvo un altercado con otro hombre.
A partir de la denuncia de los vecinos, personal del Comando de Patrullas de La Plata arribó hasta el lugar. Los voceros policiales indicaron que los efectivos intentaron averiguar lo que estaba sucediendo, pero automáticamente uno de los hombres escapó corriendo.
El otro –siempre según la versión de la Policía– habría intentado agredir a los uniformados cuando pretendieron identificarlo.
El caso ocurrió en La Plata, a dos cuadras del Ministerio de Seguridad “Primero realizó un disparo intimidatorio con balas de goma”, aclaró una de las fuentes consultadas, quien recalcó que después este mismo efectivo le gatilló en el pecho y a corta distancia cuando presuntamente el cuidacoches intentó agredirlo con el cuchillo.
La víctima caminó unos metros hasta que cayó desvanecido en la esquina de las calles 3 y 50. Allí fue asistido por una ambulancia del SAME, que lo trasladó al Policlínico San Martín de La Plata.
De acuerdo con las fuentes, González ingresó a la guardia con una herida punzante en el lateral derecho del tórax, tres heridas punzantes en el hombro (aparentemente producidas por su pelea con el otro hombre) y heridas por perdigones en el pecho efectuadas por el policía, ya que las postas de goma disparadas a corta distancia pueden ocasionar la muerte.
La víctima fue sometida a una intervención quirúrgica, pero murió a las pocas horas y se ordenó la operación de autopsia para establecer las causas del deceso.
El policía, que fue desafectado de la fuerza por orden de la Auditoría General de Asuntos Internos a cargo de Guillermo Berra, está demorado a disposición de la fiscal penal María Eugenia Di Lorenzo, quien deberá resolver su situación en las próximas horas.
Según las fuentes, las pericias balísticas y los testimonios serán claves para definir la calificación del caso y la suerte del policía que hasta el jueves prestaba servicio en el Comando de Patrullas de La Plata.
