El procedimiento, ordenado por los jueces Ramos Padilla y Villena, se hizo en la mansión que el operador tiene en el country Saint Thomas. Encontraron autos, motos y otros valores de los que D’Alessio todavía no pudo explicar su origen.
En la causa por extorsión que involucra al fiscal Carlos Stornelli, dos jueces ordenaron ayer un interminable allanamiento a la casa del operador Marcelo D’Alessio, medida que continuaba al cierre de esta edición y que se podría extender a lo largo de toda la noche.
Los magistrados se encontraron con una fortuna descomunal que, al menos por ahora, no tiene explicación. D’Alessio tiene una mansión en el country Saint Thomas, un departamento en Puerto Madero, otra propiedad en el Chaco, diez autos de lujo, dos motos de altísima cilindrada, un yate, una colección de 50 relojes de alto valor, incluyendo un Double Tourbillon que, de ser original, vale alrededor de 200.000 dólares.
El allanamiento conjunto fue realizado por el juez de Dolores, Alejo Ramos Padilla, que tiene la causa por la extorsión contra el empresario Pedro Etchebest en el marco del expediente de las fotocopias de los cuadernos, y su par de Lomas de Zamora, Federico Villena, que investiga a D’Alessio por lavado de dinero originado en narcotráfico.
El operador intentó defenderse con una declaración judicial que presentó de madrugada alegando que pidió dinero en nombre de Stornelli para avanzar en una investigación que le pidieron dos agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
Sorpresa. El juez Villena y el personal del juzgado de Dolores enviado por Ramos Padilla no pudieron salir de su asombro con todo lo que fue apareciendo en el allanamiento a la ostentosa casa del country ubicado en la localidad bonaerense de Esteban Echeverría.
Anoche seguían con el procedimiento escaneando las paredes y también el enorme jardín, ante los nervios de D’Alessio, allí presente, argumentando que no se podía buscar en el jardín porque estaban enterrados tres perros. El operador puso el grito en el cielo.
El punto clave de los procedimientos es determinar de dónde sale semejante fortuna, ya que no se conocen cuáles son los ingresos de D’Alessio. Por supuesto que los dos magistrados intentan saber si sale de las extorsiones, en el caso de Ramos Padilla, o en el vínculo con dinero del narcotráfico, que es lo que investiga Villena.
En algún diálogo anterior, D’Alessio dijo que tenía un sueldo de la embajada de Estados Unidos, algo que la delegación diplomática negó. Lo cierto es que las cifras no cierran por ningún lado.
Autos. Los funcionarios del juzgado de Ramos Padilla fueron al country con un listado de los autos que D’Alessio tiene a su nombre. Por de pronto, una camioneta Range Rover nueva, cuyo precio está por encima de los 100.000 dólares.
Es la camioneta con la que fueron a dar una vuelta, manejando Stornelli, en Pinamar. En un audio grabado por el empresario extorsionado, D’Alessio cuenta que Stornelli tiene dos Range Rover, pero de modelos anteriores.
En la nómina de autos a nombre de D’Alessio, figuraban otra camioneta enorme, la RAM 2500 –vale unos 50.000 dólares–, un Scania, un BMW X6, dos camionetas Hilux, un Peugeot 308 y dos Chevy de colección.
La mayor parte de esos vehículos no se encontraron, pero en el allanamiento anterior sí habrían encontrado una camioneta Audi y un Toyota Corolla. D’Alessio alega que alguno de los autos los vendió, aunque todos figuran a su nombre. También se deshizo de una Ferrari de su propiedad.
En el rubro motos, se encontraron dos de alta cilindrada, una de ellas sin papeles y con pedido de secuestro. O sea de origen dudoso.
Por último y para sorpresa de los investigadores, le secuestraron un yate que está a nombre del padre amarrado en San Fernando.
Lavado. La causa por lavado de dinero del narcotráfico se inició –como suele ocurrir– con un extraño anónimo. “Señor juez. Quiero decirle que hay una persona que es un mafioso que extorsiona y maneja dinero del narcotráfico, que dice que es abogado penalista en Canning, que tiene relación con jueces, fiscales, con Patricia Bullrich, tiene un spa, autos, motos, autos de carreras, una casa en Miami con helipuerto, el boliche Savia, una empresa”.
El fiscal pidió la realización de medidas, pero resultó que hubo una filtración, por lo que el juez Villena abrió una causa contra la Policía. En la AFIP, D’Alessio figuraba gastando más de 2.500.000 pesos anuales, sin explicación sobre los ingresos.
En la causa fue imputado también un juez del Supremo Tribunal del Chaco, Ricardo Cabrera, también con supuesta relación con dinero originado en el narcotráfico. Ayer se allanó un departamento a nombre de D’Alessio en la avenida Juana Manso, de Puerto Madero.
Allí vive el hijo del juez chaqueño y se encontró un teléfono satelital. Su uso es muy inhabitual ya que el objetivo es que no pueda ser rastreada ni la llamada ni la ubicación. Por supuesto que teléfonos satelitales se encontraron en poder de narcotraficantes.
En la misma línea, por orden del juez Villena se allanó una propiedad en el Chaco, igualmente a nombre de D’Alessio. En esa provincia el operador también tiene autos a su nombre.
En la casa no se encontró nada de interés: estaba alquilada. Los procedimientos siguieron en una oficina de D’Alessio en el centro porteño y una caja de seguridad, cerrada, en el Banco Galicia.
Paredes. Los oficiales de justicia llegaron ayer al country con un georadar que se aplica a las paredes y que permite saber si hay un hueco y, en ese caso, se evalúa si romper o no. Lo mismo respecto del jardín.
Ayer no se encontraron más armas. En el procedimiento de hace una semana, Ramos Padilla encontró numeroso material bélico, de inteligencia, armas muy sofisticadas y de última tecnología, además de balizas de fuerzas de seguridad, placa de la DEA, remeras del FBI, y una escopeta marca Kel Tec Modelo KSG calibre 12 UAB con un cañón de 380 a 599 milímetros que almacena 16 cartuchos.
Un detalle de interés fue la existencia de un estudio de grabación. Los magistrados se llevaron bolsas y bolsas con documentación, además de las computadoras y celulares. Como el allanamiento tuvo el objetivo de establecer la fortuna de D’Alessio para ver de dónde sale tanto dinero, resultó importante el secuestro de una inusitada colección de relojes de alto valor, de los cuales 50 estaban exhibidos.
El operador se jactaba de portar un Double Tourbillon de oro, que –según él– valía 200 mil dólares. El juez Villena lo mandó a tasar, aunque en internet es esa la cifra que figura. Habrá que ver si es trucho o no.
Origen. Como es obvio, los jueces quieren saber de dónde sale tanto dinero. Está la acusación por lavado de dinero del narcotráfico y la de extorsión. En las últimas horas empezaron a circular rumores en Comodoro Py de otros detenidos o imputados a los que se les sugirió recurrir a los servicios de D’Alessio para mejorar su situación, en la causa de las fotocopias de los cuadernos y también en algún otro expediente.
El empresario Pedro Etchebest fue el primero que tuvo la valentía de presentarse y denunciar, con nombre y apellido, al dúo D’Alessio-Stornelli. Se dice que hoy se presentarán una o dos denuncias más.
El fiscal ya intentó tirar al operador por la borda: dice que seguramente tiene un problema mental. El problema es que se reunió con él durante tres horas en Pinamar, cuando supuestamente estaba de vacaciones, y en gran parte del tiempo estuvieron a solas, demoliendo el argumento del periodismo que salió a defenderlo diciendo que el fiscal no iba a pedir una coima delante de otros.
El supuesto desequilibrado mental también estuvo en el armado de la causa por la compra de Gas Natural Licuado con el que se detuvo a Julio De Vido y Roberto Baratta, en base a una pericia trucha. Ese expediente fue decisivo: lo usaron después para quedarse con la causa de las fotocopias de los cuadernos.
El movimiento defensivo de D’Alessio consistió en presentarse en el juzgado penal número 2, abierto a la presentación de habeas corpus, a la una de la mañana del jueves. Allí declaró que le pidió dinero a Etchebest porque lo estaba investigando a pedido de dos agentes orgánicos de la Agencia Federal de Inteligencia.
La declaración fue enviada ayer al juez de Dolores y contiene los nombres de los dos agentes.
Esto no aliviaría sino que empeoraría la situación: aparecería en escena el propio Poder Ejecutivo, a través de la AFI. Finalmente está la hipótesis de que la fortuna viene de lavado de dinero de narcotráfico.
Sería un golpe mortal para el ahora desequilibrado mental, pero antes gran armador de causas en Comodoro Py, referente mediático y supuesto especialista en cualquier cosa, sobre todo en narcotráfico.