A pocos meses de las elecciones presidenciales, Cambiemos vive momentos difíciles. Entre los malos resultados electorales en las provincias y la crisis económica, se suman algunos escándalos internos que suelen tener como protagonista a Elisa Carrió.
En este caso, el apuntado por Lilita fue el diputado Nicolás Massot. El intenso cruce, que reveló el diario La Voz , se dio en el pasillo que divide el hemiciclo del despacho de la Presidencia de la Cámara de Diputados, donde Carrió estaba conversando con una persona y al percatarse que Massot pasaba por el lugar, lo señaló y le dijo: «Sabía que eras pícaro, pero no tan hijo de puta».
Ante el insulto, el jefe del bloque PRO se acercó y le preguntó: «¿Cómo me dijiste?». Y Lilita, fiel a su estilo, no se quedó callada e insistió: «Hijo de puta». En ese momento, el diputado expresó: «A mí no me faltes el respeto».
Luego, retrucó: «Sos una irresponsable, estás destruyendo todo, sos la responsable del desastre de Córdoba».
El fuerte intercambio fue presenciado por otros diputados: los peronistas mendocinos Pedro Rubén Miranda y Omar Félix y la radical Carla Carrizo, quien intentó tranquilizar a Massot.
El origen de esta pelea son las elecciones en Córdoba que ganó ampliamente el candidato peronista Juan Schiaretti que se vio beneficiado por la ruptura en Cambiemos de Mario Negri y Ramón Mestre. Es que, Massot no apoyó al candidato de Lilita y del gobierno nacional, Mario Negri.
Es más, según algunas versiones, incluso trabajó para Rodrigo de Loredo, candidato a intendente en Córdoba por el lado de Mestre. La elección en Córdoba despertó a una Carrió crítica con Cambiemos y Massot no fue el único afectado.
En ese sentido, Lilita se encargó de recordarles todo lo que el oficialismo le «debe» a Mario Negri y apuntó contra los que se «borraron» y no acompañaron en campaña.
“Voy a discutir en el seno de Cambiemos lo que significa la política clásica y humanista versus la política posmoderna, mentirosa, falaz y pegada solamente al éxito. La Coalición Cívica nació en la adversidad. No abandona a los derrotados sino que lucha por la República, que es más importante que los resultados. Nunca especulé con una derrota o victoria, nunca traicioné los principios humanistas que dicen que siempre hay que estar junto al más débil”, lanzó la diputada nacional.
«Yo apoyé al hombre que apoyó al Gobierno y al que muchos abandonaron en el momento de esa lucha. Todos debemos reflexionar cuánto le debemos a Mario Negri. Sabía los números, mayor razón para acompañar ahí, la vida no es compartir el éxito y alejarse en la derrota. Me parece inhumano, me parece servil», agregó. “Perdieron los que no acompañaron a nadie, los que se borraron. Pero en el fondo tengo cierto amargo desengaño. Qué terrible es que en las derrotas se borren todos. Me dan asco, la vida es lucha. Los dirigentes que pelean en las provincias también tienen que defender a un Gobierno que no puede obtener resultados económicos y de eso no tienen culpa los candidatos a gobernadores», concluyó la legisladora.