Alberto Fernández designó a la fiscal Cristina Caamaño, titular de Justicia Legítima, como interventora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
El presidente recibió en Casa Rosada a Caamaño, acompañado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y terminó con el suspenso que acarreaba el cargo más importante de los que quedaban por designar en su Gobierno, luego de meses de especulaciones.
En septiembre, Caamaño reavivó la polémica sobre una posible reforma de la Constitución y le recomendó a Alberto avanzar en ese sentido para recortarle poder a los jueces federales de Comodoro Py.
Caamaño no sólo le pidió a Alberto una reforma sino que además reflotó el proyecto de Cristina Kirchner para «democratizar» la justicia, que terminó en un estruendoso fracaso de la ex presidenta y que le valió el enfrentamiento con la casi la totalidad de Comodoro Py y las consecuentes causas judiciales.
Caamaño le recomendó a Fernández «ampliar» la cantidad de juzgados federales de Comodoro Py para «diluir su poder».
«Si en lugar de 12 jueces y 12 fiscales fueran más, no todas las causas le caerían a Bonadio», argumentó. Esta mañana, en una entrevista en radio Mitre, insistió: «si queremos disminuir el poder de Comodoro Py habría que ampliarlo».