Una «contundente» declaración de la comisión creada para evaluar su conducta y otra de la encargada de seguir temas sobre mujeres y diversidad son las acciones que desde el lunes prepararán los diputados para cerrar el vergonzoso episodio de su ex colega Juan Ameri, cuando este jueves fue filmado en plena sesión mientras le besaba los senos a su pareja.
Fue a las 17.20 horas, tardó minutos en viralizarse en las redes sociales y pasadas las 18 Sergio Massa volvió a presidir la sesión para suspenderlo y crear una comisión de cinco diputados que defina su futuro.
El secretario parlamentario, Eduardo Cegnul, le había informado que era la pena máxima que estaba en sus manos, previo chequeo con su prosecretaria Marta Luchetta, una histórica de la casa y capaz de recitar el reglamento de memoria.
Lo que siguió fue una larga agonía hasta que Ameri presentara su renuncia a las 0.30 horas y sea aprobada a las 3.30 de la madrugada. «Hermano, si no renuncias, te echamos», le hicieron saber Massa y Máximo Kirchner, cuando pudieron en encontrarlo. Ni bien su cara fue trendig topic, llamó a una radio local para dar su versión y apagó el teléfono.
Cecilia Moreau, vicejefa del Frente de Todos, habló unos minutos con él, pero no daba definiciones. Tanía agitaciones y ataques de llanto, que mantuvo hasta sus entrevistas de este viernes.
El operativo para forzar su renuncia, que ese día sólo podía materializarse rápido si la presentaba él, lo motorizó el senador Sergio Leavy, su padrino político y artífice de que ocupe esa banca desde diciembre. Lo reemplazó cuando ganó la suya en la Cámara alta.
Leavy posteó rápido un repudio a la conducta de Ameri, pero luego fue por más: difundió un comunicado del Frente de Todos de Salta que lo expulsaba del partido, atípico entre peronistas, pero además exigía que entregara la banca, un trámite que se demoraba en iniciar.
La comisión para definir su futuro se había conformado a las 20 horas, con cinco miembros: Cristina Álvarez Rodríguez y Cecilia Moreau por el Frente de Todos; Silvia Lospennato y Miguel Bazze por Juntos por el Cambio; y Graciela Camaño por Consenso Federal. Tenía 60 días para definir su expulsión, pero Massa y Máximo no podían permitirse ese tiempo.
La suspensión de Ameri los dejaba con un voto menos en tiempos de leyes sin mayoría asegurada y con un incómodo tema en la agenda para las semanas siguientes. Además, el 13 de octubre vence el protocolo de sesiones remotas y la oposición debe prestar consentimiento para que siga otro mes.
El operativo para forzar la renuncia de Ameri empezó con una expulsión del kirchnerismo de Salta y la espera de su renuncia, que llegó a las 0.30. En Cambiemos hubo quienes quisieron no aceptarla y debatir su caso en comisión, pero primaron los moderados.
La última vez impuso la facultad de reclamar presenciales para cuando lo considere, ya las pidió para tratar el presupuesto y el impuesto a la riqueza y Massa aún no tiene definido si amplía el recinto o busca otra sede. O si espera una nueva prórroga para rediscutir otro protocolo.
En ese contexto, la sesión de este jueves tenía proyectos consensuados, casi no fueron diputados a ocupar bancas, pero el salteño, desde su casa, la convirtió en otra jornada de suma tensión.
A las 21 horas, en una entrevista por el programa de TV Intratables, Ameri no confirmó que tuviera decidido renunciar, pero a las 0.30 envió su dimisión con firma digital. En ese tramo le explicaron que era lo mejor. La otra misión del oficialismo era lograr que Cambiemos la aceptara en el recinto y no quisiera estirar la agonía para sacar rédito político.
El intransigente de siempre volvió a ser Fernando Iglesias, del PRO, quien tuvo su oportunidad de descargarse cuando se debatía la ley para prohibir ayuda económica a empresas con sede en paraísos fiscales. «No queremos enjuagues», dijo sobre el caso Ameri.
Recién pasadas las 3.30 Massa volvió al recinto para aprobar la renuncia del diputado y cerrar una jornada eterna.
Moreau pidió aceptar la renuncia y Mario Negri, el jefe de Cambiemos, aclaró que la comisión deberá hacer un «contundente» pronunciamiento post. También lo reclamó Silvia Lospennato, del PRO.
«Le solicito al señor presidente que la comisión -independientemente de que la renuncia sea aceptada- se expida sobre la inconducta del señor diputado como una señal de que esta Cámara no va a tolerar este tipo de conductas». reclamó.
En el oficialismo quieren apurar la declaración para el lunes y en tal caso exponerla en una sesión express el miércoles, con temas que quedaron pendientes.
No llegó a tratarse la ley de fonoudiología y la que prohíbe ayuda a offshore fue retirada por Massa cuando se había aprobado en el recinto, porque varios se revelaron con un cambio aplicado a último momento por Carlos Heller, por consejo de Fernanda Vallejos.
Está pendiente una ley de cítricos y un convenio de la OIT, todo con consenso de Cambiemos.
La conducta de Ameri podría ser evaluada por la Comisión de Mujeres y Diversidad, presidida por Mónica Macha, creada por Massa ni bien asumió.
En el recinto, la futura sesión serviría además para que jure su reemplazante y el Frente de Todos no pierda una banca para lo que sigue, como hubiera ocurrido si Cambiemos se revelaba.
Después volverá el debate por dónde y cómo debatir con la mayoría diputados presentes las leyes más polémicas, el reto más grande que tienen Mássa y Máximo en lo que queda del año. Necesitan no hablar más de Ameri.