En un violento operativo, la policía quitó a la nena de los brazos de sus padres adoptivos.
Dramáticos y violentos momentos se vivieron en el Juzgado de Familia de Eldorado Misiones, cuando la policía forcejeó con un matrimonio para quitarle de los brazos a Antonella, una niña de tres años que se crio con la pareja desde que nació, pero tras la orden de una jueza fue entregada a otra familia.
Varias personas se amontonaron en el ingreso al edificio para intentar evitar que los efectivos se lleven a la niña, pero los esfuerzos fueron en vano, ya que la jueza Corina Jones les quitó la tenencia de la menor al matrimonio Dávalos-Rodríguez para darla en adopción a una pareja de mujeres policías.
Además, la jueza del Juzgado de Familia N°1, les impuso un bozal legal a la familia Dávalos-Rodríguez y a sus abogados.
«No nos dieron ningún tipo de explicación, solamente citaron a mi hermano y mi cuñada al juzgado y les dijeron que lleven a Antonella. Fuimos toda la familia, no sabíamos qué iba a pasar», explicó Andrea Dávalos, hermana del padre adoptivo.
“Se la llevaron desvanecida, la nena no paraba de llorar, le están causando un daño psicológico irreversible. Tengo entendido que se la entregaron a dos mujeres policías de Posadas que son pareja, pero no sabemos ni dónde la llevaron, estamos desesperados», agregó la mujer.
El matrimonio Dávalos-Rodríguez tenía la guarda de Antonella desde que nació, ya que su madre biológica es una paciente psiquiátrica. Por lo que la familia se encontraba realizando los trámites de adopción, cuando la magistrada decidió quitarles la custodia, explican desde el entorno de los damnificados.
LA EXPLICACIÓN DE LA JUEZA
«La niña estaba bajo cuidado de una familia en carácter transitorio dentro de un expediente cautelar», dijo en una entrevista para justificar su decisión.
La mujer explicó que ellos se encuadran en la figura de «familia solidaria con los alcances del artículo 611, que no admite que puedan adoptar a la niña» y aseguró que eso «siempre se les notificó a lo largo del expediente».
«A partir de que se empezó a hacer la vinculación de la niña con las familias, con el registro de adoptantes, las personas [la familia solidaria] empezaron a manifestarse en contra», dijo sobre el matrimonio Dávalos-Rodríguez.