La máxima autoridad de la agencia china de control de enfermedades evalúa distintas opciones para elevar la efectividad de las vacunas contra el coronavirus que se desarrollan en el país asiático, tras reconocer que su eficacia no es alta.
Las fórmulas chinas “no tienen tasas de protección muy altas”, admitió el director de los Centros chinos de Control de Enfermedades, Gao Fu, en una conferencia el sábado en la ciudad suroccidental de Chengdu.
“Ahora se considera oficialmente si deberíamos utilizar diferentes vacunas de distintas líneas técnicas para el proceso de inmunización”, dijo Gao, citando a otros expertos que señalan que mezclar vacunas puede impulsar las tasas de efectividad.
Las vacunas fabricadas por dos farmacéuticas estatales, Sinovac y Sinopharm, se han exportado a 22 países, como Argentina, Brasil, Chile, Perú, México, Turquía, Indonesia, Hungría, Brasil y Turquía, según el Ministerio de Exteriores.
Investigadores en Brasil concluyeron que la efectividad de la vacuna de Sinovac para evitar infecciones sintomáticas era de apenas el 50,4%, cerca del umbral del 50% en el que los expertos consideran útil una vacuna. Mientras que la Sinopharm, que se aplica en Argentina, tiene una efectividad de casi el 79%, y previene en un 100% los casos moderados y graves de la enfermedad.
Gao dijo que, hasta el 2 de abril, unos 34 millones de personas recibieron las dos dosis requeridas de vacunas contra el coronavirus en China y unos 65 millones recibieron la primera.