Al menos cuatro personas murieron en el derrumbe de un edificio residencial cerca de Miami Beach, y los rescatistas siguen buscando a los desaparecidos, que llegan a 159, entre ellos muchos procedentes de América Latina. En el edificio había al menos 9 argentinos. El colapso se produjo alrededor de las 2 de la madrugada del jueves 24 de junio.
«Estamos sin noticias de 159 personas. Además, queremos confirmar que el balance de fallecidos se sitúa ahora en cuatro (…) me enteré al despertar que anoche sacaron tres cuerpos de los escombros», dijo Daniella Levine Cava, alcaldesa del condado de Miami-Dade.
Un número aún no determinado de residentes dormía en este edificio de 12 pisos situado frente al mar, en la ciudad de Surfside, que se derrumbó parcialmente el jueves y se convirtió en una montaña de ruinas entre las que asomaban apartamentos destruidos.
«Una parte del edificio se cayó completamente. No existe más», dijo Nicolás Fernández, un argentino de 29 años de Miami, que aguardaba noticias de amigos que se estaban quedando esa noche en el apartamento de su familia en el inmueble. «No sé de ellos. No sé si están vivos», dijo a AFP.https://rudo.video/vod/bLWwPg
Decenas de bomberos y policías, ayudados con drones y perros rastreadores, trabajaron durante la noche del jueves al viernes, agregó Levine Cava.
En la madrugada el viernes, el presidente Joe Biden declaró la emergencia y ordenó ayuda federal para las labores de búsqueda.
«La acción del presidente da autoridad al departamento de Seguridad Interior, la agencia federal de gestión de situaciones de emergencia (FEMA), para coordinar todos los esfuerzos de rescate», dijo la Casa Blanca en un comunicado.
Según el senador republicano de Florida Marco Rubio, «casi un tercio de los desaparecidos son extranjeros». Muchos eran latinoamericanos.
La hermana de la primera dama de Paraguay, Sophía López Moreira, su esposo y tres hijos así como una empleada figuran entre los desaparecidos, informó el canciller Euclides Acevedo. Igualmente se desconoce el paradero de nueve argentinos y tres uruguayos, según fuentes consulares de esos países.
Se reducen las esperanzas
En un centro comunitario en Surfside, familiares de los desaparecidos lloraban mientras esperaban noticias. Inquilinos del edificio en ruinas que por suerte estaban en otra parte cuando ocurrió la tragedia descubrían que de pronto se quedaron sin casa.
Erick de Moura, de 40 años, había pasado la noche del miércoles en la casa de su novia. «Acabo de regresar y la escena es impactante», dijo. «Hay mucho dolor. Me siento bendecido por estar vivo».
Unos 55 apartamentos fueron afectados por el colapso, según el jefe adjunto del cuerpo de bomberos de Miami-Dade, Ray Jadallah.
En el edificio vivían residentes a tiempo completo y también personas que pasaban solo temporadas, por lo que es difícil saber cuántos estaban en el interior cuando colapsó.
«Es complicado, no se sabe. La esperanza sigue ahí, pero está menguando», dijo la comisionada del condado de Miami-Dade, Sally Heyman, a CNN.
Algunos residentes pudieron escapar caminando por las escaleras, mientras otros fueron rescatados desde los balcones.
«Es una situación realmente trágica. Estamos preparándonos para malas noticias dada la destrucción que estamos viendo», dijo a la prensa el gobernador de Florida, Ron DeSantis.
El alcalde de Surfside, Charles Burkett, dijo que aún no se sabe por qué colapsó el inmueble. «Es como si hubiese explotado una bomba, pero estamos muy seguros de que no explotó una bomba, así que es otra cosa», dijo.
Según medios locales, el edificio fue construido en 1981 y tenía 130 viviendas. Heyman dijo a CNN que se había estando reparando el techo del edificio, aunque subrayó que las razones del colapso no estaban claras.