El ciclón de categoría 4 tocó tierra esta mañana, descargando toda su furia, con intensas lluvias y vientos de hasta 230 km por hora, en el país más pobre del hemisferio.
El ojo del poderoso huracán Matthew, de categoría 4, con vientos máximos sostenidos de 230 km por hora tocó hoy tierra en el oeste de Haití, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos. Y azotaba este lunes con fuerza devastadora al país, con un saldo de dos muertos y un desaparecido, y grandes inundaciones, obligando a miles de personas a huir.
Más de cuatro millones de niños pueden ser expuestos a los daños del huracán Matthew en Haití, alertó Unicef. «Es el peor huracán en golpear la isla en las últimas décadas, y el daño será sin duda significativo», declaró Marc Vincent, representante de Unicef en Haití.
Los vuelos programados para hoy, martes, entre la República Dominicana y Santiago de Cuba y entre el primer país y Providenciales fueron suspendidos.
El «extremadamente peligroso» ciclón impactó en la ciudad de Anglais en torno a las 7 de la mañana con vientos máximos sostenidos de 230 km/h, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, con sede en Miami.
El huracán más amenazante en casi una década, Matthew azotaba con furia la costa sur de Haití, mientras grandes marejadas causaban inundaciones, alimentadas por fuertes precipitaciones.
Antes de tocar tierra en Haití -el país más pobre de las Américas-Matthew ya había causado inundaciones en 11 comunidades, según Edgar Celestin, portavoz de la agencia de Protección Civil, a la AFP.
En Anglais, las aguas habían inundado la ruta nacional, y Matthew, queavanzaba rumbo norte a unos 14 km/h, causaba estragos en las precarias edificaciones del sudeste del país.
En Les Cayes, la tercera ciudad del país, el agua del mar inundaba las calles.
«Ya hemos tenido un deslave entre Les Cayes y Tiburon», en el Departamento Sur, dijo Marie-Alta Jean-Baptiste, directora de Protección Civil. Más de 6.400 personas fueron evacuadas a refugios temporales, aunque muchos otros se negaron a dejar sus pertenencias en las zonas más vulnerables.
Entre esas áreas figuran barrios extremadamente pobres y densamente poblados como Cite Soleil -donde 100.000 de sus 500.000 residentes enfrentan serios riesgos de inundación- y el capitalino Cite L’Eternel, sobre la costa.
«A nadie le gusta abandonar su hogar, pero el mar va a subir y eso es muy peligroso», señaló Pedro González, un chef retirado que abandonó el islote donde reside frente a la ciudad de Santiago.
El gobierno suspendió las clases el lunes con el fin de que los centros escolares sirvan de refugio. Se montaron 1.300 refugios provisionales en todo el territorio, aunque solo permiten acoger a 340.000 personas.
Haití cuenta con más de 10 millones de habitantes. Miles de personas aún viven en tiendas de campaña tras el devastador terremoto que devastó a Haití en 2010.
Además, la erosión es muy peligrosa debido a las montañas y la desforestación. Las previsiones apuntan a que Matthew seguirá adelante para volver a tocar tierra en el extremo oriental de Cuba, una zona poco poblada, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
El centro de huracanes dijo que probablemente emitiría un alerta por tormenta tropical o huracán para los Cayos de la Florida o la península y que las condiciones en las playas de la costa atlántica podrían volverse peligrosas en los próximos días.
«Estamos viendo un peligroso huracán que se acerca a las inmediaciones del oeste de Haití y el este de Cuba», dijo Richard Pasch, un especialista de huracanes en la agencia estadounidense.«Esperamos que la gente que pueda sufrir inundaciones y deslaves salga de allí y se reubique debido a que es allí donde hemos visto pérdida de vidas en el pasado».
Estados Unidos recomendó hoy a sus ciudadanos «aplazar sus viajes» al oriente de Cuba.
En Tabarre, un suburbio de Puerto Príncipe, las autoridades exhortaron a los habitantes del barrio pobre que viven junto a un río lodoso a guarecerse en una escuela local donde se colocaron catres. Aunque algunos sí fueron, muchos se negaron por temor a que les roben lo poco que tienen.
«¡Si perdemos nuestras cosas no las vamos a recuperar!», dijo Toussaint Laine mientras la policía y funcionarios de la alcaldía exhortaban al hombre desempleado y a su familia a que se fueran de allí.
La agencia de protección civil de Haití reportó la muerte de un pescador en aguas agitadas por la tormenta. Un hombre falleció el viernes en Colombia, y un joven de 16 años perdió la vida en San Vicente y las Granadinas el 28 de septiembre cuando el meteoro pasó por el Caribe oriental.
Dos niños murieron hoy en un barrio de la capital dominicana tras derrumbarse su casa por las fuertes lluvias provocadas por el huracán.