El presidente Donald Trump dijo el lunes que se está desplegando a miles de soldados fuertemente armados y agentes de seguridad para detener la violencia en la capital de Estados Unidos, y prometió hacer lo mismo en otras ciudades si los alcaldes y los gobernadores no logran recuperar el control de las calles.
«Los alcaldes y los gobernadores deben establecer una presencia abrumadora de fuerzas de seguridad hasta que la violencia haya sido sofocada», dijo Trump en la Casa Blanca mientras agentes dispersaban a los manifestantes con gases lacrimógenos a pocas cuadras de distancia.
«Si una ciudad o estado se niega a tomar las medidas necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré al Ejército y resolveré rápidamente el problema por ellos».