El presidente Alberto Fernández agradeció este martes 4 de agosto «la comprensión de los acreedores que entendieron que la Argentina estaba haciendo un enorme esfuerzo», tras el acuerdo alcanzado con los bonistas a través del Ministerio de Economía.

«Nunca fuimos a una pelea; fuimos a resolver un problema y lo estamos haciendo», dijo el Presidente, al encabezar el acto de relanzamiento del plan ProCreAr. También agradeció la «comprensión de los organismos internacionales y de más de 150 economistas que se sumaron a la propuesta argentina».

Esta madrugada los acreedores aceptaron la mejora de la oferta que hizo la Argentina y el acuerdo con los privados por la deuda quedó sellado.

La negociación exitosa con los privados le permite ahora a Fernández renegociar el otro paquete: el préstamo del FMI por más de 50 mil millones de dólares que tomó Mauricio Macri en 2018. Durante el acto, Fernández dijo: «Estamos cumpliendo con nuestra palabra de poner al país de pie y de que la deuda no nos iba a impedir lograr un proceso de desarrollo para la producción y el trabajo.”.

El presidente afirmó: “Veníamos de dos años de caída de la economía, 25 mil empresas cerradas, de un desempleo creciente, de una pobreza que rozaba el 40 por ciento».

«Podemos decir con tranquilidad que el objetivo que nos fijamos lo hemos logrado», indicó. Esta madruga, y a 24 horas de que cierre el plazo para adherir a la oferta, el Gobierno presentó una serie de modificaciones a su propuesta de reestructuración de deuda, que ya recibieron el visto bueno de los principales fondos de inversión.

En un comunicado, el Ministerio a cargo de Martín Guzmán informó que «la República Argentina y los representantes del Grupo Ad Hoc de Bonistas Argentinos, el Comité de Acreedores de Argentina y el Grupo de Bonistas del Canje y otros tenedores llegaron a un acuerdo que les permitirá a los miembros de los tres grupos de acreedores apoyar la propuesta de reestructuración de deuda de Argentina».

La oferta formal de Argentina, presentada ante la comisión de valores de Estados Unidos, contempla el pago de unos 53,5 dólares por cada 100 de deuda, mientras que los acreedores exigen unos 56,5 dólares por cada 100. El nuevo planteamiento coloca la recuperación por encima de los 54 dólares por cada 100, aunque mejora los plazos de pago y sin tocar la oferta económica.  

Incluirá 9 líneas que abarcan desde la adquisición de viviendas y el otorgamiento de créditos para acceder a lotes con servicios a préstamos que permitan comprar materiales de construcción y contratar mano de obra para realizar refacciones en casas ya habitadas. Deuda externa: Los fondos anunciarían un principio de acuerdo De este modo, prevén construir 14 mil viviendas, otorgar 273 mil créditos para refaccionar o ampliar propiedades y adjudicar 10 mil nuevos lotes con servicios en todo el país, a través de una inversión de 25.000 millones de pesos durante 2020. 

También está prevista la ampliación del rango de salarios mínimos para participar del programa oficial: habrá cuatro segmentos de ingresos que van desde 0,5 salarios mínimos (cerca de $8.500) -para acceder a los microcréditos para pequeñas mejoras- hasta 4,5 salarios (casi $76.000).