El Gobierno está seguro de tener los votos para sancionar el presupuesto que presentó esta mañana Nicolás Dujovne, pero aceptará algunos cambios para contentar a la oposición y contener a los propios.
El principal será sostener un subsidio para el transporte de las grandes ciudades, que en muchos casos tienen líneas de colectivos municipales y podrían ser desatendidas por sus gobernadores.
El más preocupado es Ramón Mestre, intendente de Córdoba, porque descuenta que Juan Schiaretti sólo subsidiará los servicios de colectivos que atraviesan varias ciudades y están bajo su órbita.
También temen por sus finanzas los alcaldes de Mendoza, La Plata, Salta y hasta el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta, todos de Cambiemos.
Dujovne aceptará sostener un subsidio para el transporte de las grandes ciudades. Los gobernadores están conformes con las retenciones y el impuesto a los bienes personales.
Los subsidios económicos fueron el gran ajuste del presupuesto, con una baja del 6.9% que consideradas la fuerte devaluación y la inflación los reducen a una mínima porción.
El transporte, en total, recibirá un 18% menos y los gobernadores deberán trasladar los costos de los servicios a los usuarios o absorberlos con sus recursos. Se espera una temporada de tarifazos.
Los socios principales de Cambiemos para aprobar el presupuesto serán los partidos provinciales y los bloques «Argentina Federal», identificados con los gobernadores peronistas, que aflojaron cuando convencieron a Mauricio Macri de gravar a los «beneficiados» por la devaluación.
Apuntaban a los exportadores, que soportarán mayores retenciones por sus ventas; y a quienes blanquearon propiedades en el exterior y seguirán pagando bienes personales, uno de los artículos de la addenda al pacto fiscal que Rogelio Frigerio puntea con los gobernadores y enviará al Senado en los próximos días.
Otros puntos de esa ley será sostener el impuesto a los sellos, eliminar las exenciones a Ganancias a sectores como cooperativas y mutuales dedicadas a las finanzas y una nueva ayuda a las cajas previsionales provinciales.
«Con esos aportes, compensamos la eliminación del fondo federal sojero», confesó a LPO un diputado cercano a uno de los gobernadores que negoció estos números en el Ministerio del Interior.
La continuidad del Fofeso, eliminado por decreto, fue motivo de un duro reclamo de los gobernadores y el diputado tucumano Pablo Yedlin impulsó un llamado a sesión especial para restablecerlo.
Fue convocada para el miércoles y para evitar que haya quórum en el Gobierno preparan una resolución con una compensación por obras públicas suspendidas. En la Casa Rosada creen que no serían tantas.
Pese a la urgencia y la confianza del Gobierno, los diputados de Argentina Federal no quieren aprobar la ley en un trámite express y hasta proponen algunos retoques.
«Vamos a mirar de cerca los aportes a Salud y Educación», remarcan, decididos a no tomarse en serio cualquier pronóstico sobre inflación y tipo de cambio. «El año pasado los aprobamos y los cambiaron al otro día», recuerdan.
El dólar a 40,10, o sea, casi estable, y la inflación «promedio» del 23% fueron considerados cálculos muy auspiciosos. No así la inflación del 42% que reconoció Dujovne para 2018, por encima al aumento de cualquiera de las partidas del año próximo. Se confirma así el feroz ajuste por inflación.
Las universidades recibirán un 39% más que ne 2019, casi lo mismo que exigieron los rectores. Fueron más beneficiadas que la seguridad social (35%), la asistencia social (29%), salud (29%) y ciencia y técnica (28%). Esos números se discutirán.
El Frente Renovador de Sergio Massa pedirá un aporte a las Pymes, pero Cambiemos lo rechazará, porque está seguro de poder llegar a la mayoría de Diputados sin los votos de sus 21 alfiles. Confía en otros bloques.